El martes 24 amanecimos con la noticia de que Elon Musk había decidido despedir al 80% de su plantilla de Twitter en España. De este modo, reducían a cinco el número de trabajadores, que estarán dedicados a ventas y desarrollo de negocio. Tras esta información ahora todos nos estamos preguntando ¿En qué momento dio comienzo el declive de esta red social?
Esta historia da comienzo el pasado 4 de noviembre cuando Elon Musk se convirtió en el dueño de Twitter. ¿Su primera decisión como dueño de esta gran empresa? Despedir a la cúpula directiva junto a 7500 empleados de las distintas áreas de la empresa.
Clausura de cuentas
La siguiente polémica llega con la clausura de varias cuentas de periodistas que trabajaban en grandes medios de comunicación como: CNN, The New York Times, The Washington Post, entre otros. Estos periodistas tenían en común ser liberales y haber seguido la actividad del propietario de Twitter.
La reacción ante esta amenaza de la libertad de expresión no tardó en recibir respuesta por parte de la Unión Europea. La institución europea amenazó con sanciones por el incumplimiento de la ley sobre la obligación de aplicar las condiciones de uso de manera “proporcionada y con respeto a los derechos fundamentales”
Mientras que estas cuentas eran suspendidas, el magnate realizaba una encuesta en la que le preguntaba a los usuarios sobre la reapertura de la cuenta de Donald Trump. La encuesta triunfó aunque el expresidente declaró que no había ninguna razón para volver a esta red social, lo que incendió aún más esta app.
Inicio de los recortes en la red social y búsqueda de nuevos métodos de financiación
Con toda la polémica servida y la situación económica sin mejorar. El 21 de diciembre Elon Musk anunció su dimisión como director ejecutivo de Twitter “tan pronto como encuentre a alguien lo suficientemente tonto como para aceptar el puesto.”
Esta decisión se tomó tras otra polémica encuesta que dejó a más de uno en vela, expectante por saber si dimitirá o si por el contrario, ignoraría los deseos de los participantes.
Y las cosas no fueron a mejor. El 24 de diciembre Musk comenzó a aplicar medidas drásticas. La primera fue la desconexión y cierre de los servidores de una de las principales instalaciones de almacenamiento de datos. Sin considerar el riesgo que podría suponer para el correcto funcionamiento de su red social.
Otra de estas medidas pasó por deshacerse del equipo de limpieza y seguridad de su sede en San Francisco. Posteriormente, puso a subasta gran parte del mobiliario, incluyendo ordenadores, mesas, máquinas de café, neveras. Además, incluyeron elementos corporativos míticos como la estatua del pajarito de Twitter.
Dentro de la plataforma, Twitter anunció el lanzamiento de Twitter Blue. Se trata de un modelo de suscripción de pago mediante el cual, las cuentas suscritas podrán beneficiarse de una cuenta sin publicidad, con resúmenes de artículos, con opciones de personalización y con un sistema de verificación, entre el que se encuentran el ya conocido check azul y un check dorado, con el que distinguen las cuentas empresariales. Por el momento, está disponible en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Japón.
La situación de Twitter en la actualidad
Tras este repaso, volvemos al punto actual. Con la reciente despedida del 80% de su plantilla en España, todos tienen la vista puesta en los próximos movimientos de Elon Musk. Aunque ya se habla sobre la bancarrota de Twitter, una empresa que además de costar 300 millones de dólares, no deja de perder dinero y, a no ser que las cosas cambien radicalmente, el futuro de la red social del pájaro azul, no pinta alegre.
Andrea Arroyo
Técnico de Comunicación en Avance Comunicación